Historic Crew Stadium – descripción del estadio

Después de la Copa Mundial de 1994, considerada ampliamente como exitosa para los anfitriones, Estados Unidos vio renacer una liga de fútbol profesional: la MLS. Entre los 10 clubes originales que formaron parte desde su inicio se encontraba el Columbus Crew, que con gran orgullo contaba con 12 000 personas que adquirieron boletos de temporada antes de su primer partido. Inicialmente, los encuentros se disputaron en el gigantesco Ohio Stadium, pero resultó ser demasiado grande para el Crew, y el campo resultaba demasiado estrecho. Por lo tanto, cuando el "horseshoe" fue renovado en 1999, el Crew decidió mudarse.

Durante años, este lugar fue conocido simplemente como Columbus Crew Stadium. Esta estructura simple de acero y concreto se construyó en tan solo 274 días. Durante ese tiempo, se levantaron gradas con una altura de 20 metros (este y oeste), permitiendo que 22 555 personas ingresaran al estadio. Aunque no es excepcional en comparación con otros estadios en el mundo, es especial por una razón crucial: fue el primer estadio construido específicamente para un club de fútbol profesional en Estados Unidos.

Precisamente por esa razón, a menudo se le considera la "casa" del fútbol en Estados Unidos y ha demostrado su valía en numerosos partidos internacionales del equipo nacional estadounidense. Curiosamente, el equipo ha jugado aquí desde 2000 y, hasta finales de 2016, ¡no había perdido ni un solo partido! El Crew Stadium también ha albergado numerosos partidos de la Copa MLS, encuentros de las estrellas y partidos de la Copa Mundial Femenina 2003. Además, ha sido utilizado para conciertos con una asistencia de hasta 30 000 personas, así como para lacrosse, fútbol americano y rugby, lo cual le otorga una imagen de versatilidad a pesar de haber sido diseñado principalmente para el fútbol.

A lo largo de los años, el estadio apenas ha experimentado cambios, aunque se realizó una notable alteración en 2008. En ese año, se demolió parte de la tribuna norte y se instaló un escenario de conciertos permanente en su lugar. Además, se añadieron pequeñas secciones de techo en la zona sur.

En 2015, el estadio obtuvo su primer acuerdo de derechos de nombre con MAPFRE. Esta compañía de seguros española cuenta con oficinas en Columbus.