Neo Química Arena – descripción del estadio

Corinthians ha estado intentando construir un nuevo estadio desde finales del siglo XX, pero sus cuatro diseños consecutivos tuvieron que ser descartados sin avanzar. No fue hasta que Brasil obtuvo la sede de la Copa Mundial de la FIFA 2014 que la oportunidad se hizo realidad. Aunque la FIFA inicialmente aceptó el Morumbi, que era mucho más grande pero anticuado, finalmente se aprobó la construcción de un nuevo estadio. El cambio del primero al nuevo estadio del Corinthians generó controversia.

Los trabajos preparatorios en las colinas de Itaquera, un distrito del este con depósitos de ferrocarril alrededor, comenzaron en mayo de 2011. Incluso en ese momento, el estadio se consideraba en riesgo de no cumplir con los plazos de entrega. Debido a dificultades financieras y dos trágicos accidentes posteriores, se produjeron importantes retrasos, de más de 6 meses. Como resultado, a pesar de tres eventos de prueba en mayo de 2014, el estadio quedó incompleto para la Copa Mundial de 2014.

Diseñado por CDC Arquitetos, el estadio también generó debate debido a su estética discutible y la funcionalidad de algunas características. En ocasiones, se criticó su forma afilada y angular, y el techo, que se extiende más de 30 metros sobre las gradas de los extremos, resultó ineficaz para proteger a algunos espectadores de los elementos.

Sin embargo, el diseño original hizo que el estadio se destacara entre todos los demás construidos para el torneo y, de hecho, entre los estadios construidos en todo el mundo. Con unas dimensiones de 267x228x43 metros, el estadio está revestido de color blanco: vidrio no transparente en el lado oeste, un sistema de persianas con una pantalla LED integrada de 3100 metros cuadrados en el lado este, y el resto cubierto con materiales compuestos.

Las gradas de los extremos quedaron con un solo nivel y el techo alto dejó mucho espacio para la expansión. Durante la Copa Mundial, esto permitió agregar más de 20 000 asientos temporales. En su punto máximo, las gradas tienen 9 pisos, que incluyen 3 pisos de estacionamiento subterráneo, espacios de hospitalidad para hasta 10 000 personas, oficinas del club, un centro de convenciones y toda la infraestructura de prensa necesaria. La grada oeste ofrece 4 grandes suites (de 81 a 84 personas) y 85 palcos más pequeños (de 12 a 27 personas).

El proyecto se considera privado, con la mayoría de la financiación a cargo de Corinthians. Sin embargo, se han hecho serias acusaciones sobre condiciones preferenciales de financiamiento por parte del sector público. Las primeras estimaciones sugerían que el costo sería de aproximadamente R$ 820 millones, de los cuales R$ 400 millones serían financiados por el gobierno federal. El costo final aún no se conoce, pero se considera que se acerca a R$ 1 billón.

Además de los partidos de Corinthians y la Copa Mundial de 2014, el estadio también fue seleccionado para el fútbol en los Juegos Olímpicos de 2016 y se diseñó para albergar otros eventos de entretenimiento. No fue hasta 2020 que Corinthians logró cerrar una asociación de derechos de nombre. Una vez firmado el acuerdo, es válido por 20 largos años, durante los cuales el recinto se conoce como Neo Química Arena.