Hidegkuti Nándor Stadion – descripción del estadio

Las obras del nuevo estadio del MTK Budapest fueron iniciadas en 2015 gracias al programa nacional de reconstrucción de estadios deportivos. El antiguo estadio fue demolido en la primera mitad de 2015, pero la construcción del nuevo comenzó efectivamente en enero de 2016. ¿Por qué sería importante? ¡Porque esto significa que toda la estructura fue entregada en solo 9 meses!

Aunque gran parte del nuevo estadio fue prefabricado y permitió un ensamblaje rápido, también hay porciones significativas construidas de forma monolítica en el lugar. Particularmente visibles son los grandes muros de concreto detrás de cada gol, que se convirtieron en la parte más controvertida del diseño. Mientras que, por un lado, los muros permitían que el estadio fuera una especie de cuenco cerrado, también crean una impresión muy cruda e imponente, aunque interesante en su forma.

Los muros, al igual que la disposición general del estadio, son el resultado de conceptos adoptados en 2014. En ese momento se decidió que el campo de juego debería girar 90 grados en comparación con el antiguo para adaptarse mejor a las regulaciones de la UEFA/FIFA. Este ajuste permitió ubicar a todos los espectadores a lo largo de los lados, pero también dejó apenas suficiente espacio para los muros de concreto en ambos extremos, cerca de las calles cercanas.

La rotación del estadio liberó mucho espacio en el este y el oeste, lo que permitió la creación de más de 40 palcos VIP. Esto era más importante que cualquier aumento potencial en la capacidad, ya que el MTK Budapest nunca necesitó más capacidad que la anterior (5515 espectadores). Sin embargo, el club tenía el deseo de crear amplias zonas corporativas, lo que aumentaría los ingresos en los días de partido. En comparación con la capacidad total, la escala de las secciones empresariales es casi sin precedentes a nivel mundial.

La construcción fue muy rápida, pero también resultó significativamente más costosa de lo anticipado. En 2014, se esperaba que se mantuviera dentro de los 6 a 6,5 mil millones de florines húngaros. Al final, aumentó a 7,26 mil millones de florines húngaros, lo que representaba $26 millones al final de la construcción.