Estadio Monumental David Arellano – descripción del estadio

El estadio Monumental se suponía que sería uno de los estadios más espectaculares de Sudamérica. Junto con el presidente de Colo-Colo, Antonio Labán, la nueva casa de "El Cacique" debía albergar a 120 000 personas. Más de 60 000 se encontrarían en la tribuna inferior hundida, toda ella por debajo del nivel del suelo, mientras que más de 50 000 restantes estarían en la tribuna superior de hormigón. Era con mucho el proyecto más ambicioso de Chile y, sin duda, uno privado sin precedentes.

En 1956, Colo-Colo adquirió 28 hectáreas de tierra en el sureste de Santiago y comenzó las obras de excavación para la tribuna inferior. Se proyectó que el estadio sería el más impresionante de Sudamérica y se construiría para la Copa Mundial de 1962.

Sin embargo, cuando las obras estaban avanzadas en un 75%, tuvo lugar el gran terremoto de Valdivia. Aunque Santiago no se vio tan afectada, la Copa Mundial se redujo solo a los estadios existentes, y las obras en el Monumental se detuvieron indefinidamente sin el apoyo público.

A Colo-Colo le llevó 15 años poner en funcionamiento el estadio, y el primer partido se celebró en 1975. Desafortunadamente, solo se jugaron seis partidos antes de que se descubriera que el edificio era deficiente y obligara a Colo-Colo a abandonarlo de nuevo.

Finalmente, después de 14 años más, el estadio se inauguró en 1989. Tanto este intento, finalmente con éxito, como el anterior solo fueron posibles gracias a las inyecciones financieras después de que el club vendiera a dos jugadores prominentes, uno en cada ocasión. El dinero sirvió como presupuesto de construcción y como una escapatoria final del Estadio Nacional hacia un hogar privado. El Popular logró convertirse en el primer equipo chileno en ganar la Copa Libertadores en 1991, cuando también se erigieron las actuales ocho torres de iluminación.

Después de que la FIFA informara en 2006 que el país no tenía ningún estadio que cumpliera con las normas internacionales, Colo-Colo intentó actualizar su estadio lo suficiente como para tener las mejores instalaciones a nivel nacional. La capacidad de más de 60 000 se redujo debido a las preocupaciones de seguridad y luego tras la instalación de asientos individuales. No obstante, todavía hay graderío disponible en la tribuna norte (donde se sitúan los fanáticos de la Garra Blanca) y en la tribuna sur.

Hasta la fecha, la visión de los años 50 del estadio más grande de Chile nunca se ha implementado en su totalidad. Pero con una capacidad de más de 47 000, el estadio sigue siendo el estadio privado más grande de Chile, inferior en tamaño solo al legendario Nacional. Esto le ha permitido albergar varios eventos internacionales, incluidos partidos de la selección chilena y conciertos anuales. Además, fue el único estadio privado de la Copa América 2015.