Estadio Fiscal – descripción del estadio

Comúnmente conocido como "El cementerio de elefantes", el estadio en el oeste de Talca (centro de Chile) data de 1937 y desde el principio ha sido el hogar de los Rangers de Talca. Inicialmente, su graderío se centraba alrededor de la tribuna este, construida sobre un vertedero, y la tribuna oeste se agregó más tarde, alcanzando una capacidad máxima de 12 000 espectadores. En la década de 1990, gracias a la colaboración entre Chile y España, se construyó una moderna pista de atletismo. Sin embargo, con el paso del tiempo, el estadio ha sufrido un deterioro significativo.

Los cambios cruciales comenzaron en 2010-2011, cuando se llevó a cabo una importante remodelación como parte de un programa nacional de estadios en honor al bicentenario de Chile. Se construyó una nueva tribuna oeste desde cero con una cubierta parcial y una superficie de 3530 m2. La histórica tribuna este se cubrió con nuevos escalones y asientos. Si bien los cambios mejoraron el estándar del estadio, también resultaron en una disminución de la capacidad de 12 000 a 8300 debido a la instalación de asientos. En ese momento, ya se confirmó que la segunda fase se llevaría a cabo en una fecha posterior.

La promesa se cumplió en 2017 por parte del Ministerio de Obras Públicas. La tribuna oeste se amplió (tanto en términos de asientos como de superficie) y se cubrió completamente. La tribuna este recibió pabellones independientes con infraestructura sanitaria y de catering para los aficionados. Ambos extremos se construyeron desde cero y se cubrieron, junto con la tribuna este, con 7700 m2 de membrana de PVC.

Junto con el diseño revisado, se dejó una apertura en el lado noroeste. Esta sirve no solo como paso técnico para vehículos, sino también como una puerta de bienvenida para los aficionados, muchos de los cuales llegan al estadio desde este lado.

Al igual que con muchos estadios en Chile, el proyecto se caracteriza por cumplir con un marco de tiempo y gastos disciplinados. La primera fase se completó en solo 255 días, mientras que la segunda duró más, alrededor de 470 días. En total, la reconstrucción consumió 12,3 mil millones de pesos (alrededor de $15,5 millones al momento de la reapertura).