España: 15 años de vergüenza, escándalo (por el) mundial y sospechas - lo de siempre en el Nou Mesta
fuente: El Pais, GolDigital, SuperDeporte; autor: Miguel Ciołczyk Garcia
El domingo se cumplieron 15 años desde el día en que se paralizaron las obras del Nou Mestalla. Ante el anuncio del club de que se reanudarán, se ha formado una coalición que quiere una auditoría de la inversión. La RFEF tampoco oculta su impaciencia. La candidatura del Valencia al Mundial de 2030, en riesgo.
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15 años de incertidumbre
25 de febrero de 2009. El presidente del club, Vicente Soriano, anuncia la suspensión de las obras del Nou Mestalla, explicándo su decisión por falta de fondos. Sin embargo, el problema es mucho más grave, ya que el plan del anterior presidente, Juan Soler, era cubrir la inversión no con préstamos, sino con los ingresos del club y la venta del solar del actual Estadio de Mestalla. ¿El resultado? 547 millones de euros de deudas.
Después de 15 años, el esqueleto de hormigón sigue siendo... eso, sólo un esqueleto de hormigón, que se parece más al Coliseo romano que a una instalación moderna. En lugar de crear el mejor estadio del mundo, la inversión ha traído un sinfín de problemas económicos, deportivos y políticos. Aunque en diciembre se anunció la intención de reanudar las obras, los políticos, los aficionados y la FIFA ya no confían en la administración del club y quieren certezas, no declaraciones.
Inusual coalición de auditoría
VOX, PP y Compromís adoptaron una actitud de desconfianza ante la declaración. Presentaron una solicitud ante la comisión de urbanismo de la ciudad para que se realizara una auditoría externa que detallara los gastos ya realizados durante la inversión y la cantidad necesaria para completarla.
El objetivo de la petición era obligar a Peter Lim, propietario del Valencia CF, a garantizar esa cantidad y a comprometerse a cumplir con las fechas. A cambio, el ayuntamiento, gobernado por PP y VOX, debía dar permiso para que se reanudaran las obras, con el fin de zanjar el asunto y poder ser sede del Mundial de 2030.
La RFEF presiona, Peter Lim resiste
La RFEF intentó forzar al empresario singapurense a hacer lo mismo. La federación sabe que no conceder la organización del Mundial de 2030 a la tercera ciudad más grande de España suena a broma, pero quedará aún peor si designa un estadio que no se llegue a construir.
Peter Lim, sin embargo, se ha negado a firmar un protocolo que permitiría a Valencia unirse a las filas de los anfitriones de la Copa del Mundo, al menos hasta que se complete la auditoría. La razón, por supuesto, es la incapacidad de comprometerse a tener el Nou Mestalla terminado para 2029.
¿El fin del sueño mundialista?
Como consecuencia de estas decisiones, las posibilidades de que Valencia se convierta en sede del torneo se reducen a ojos vista, ya que es probable que la auditoría se prolongue al menos unos meses. En cambio, no faltan ciudades deseosas de ocupar el lugar de la metrópoli mediterránea.
El viernes 23 de febrero se acabó el plazo previsto para tomar una decisión. Zaragoza, por ejemplo, firmó el protocolo, comprometiéndose a adecuar la sede a los requisitos de la FIFA. Aunque los políticos están intentando que la ciudad sea sede, la FIFA tendría que retrasar su decisión a petición de la RFEF. Lo que juega a favor de Valencia es el hecho de que no todos presentaron sus documentos en el plazo previsto. Sin embargo, la situación dista mucho de ser la ideal y la batalla por desbloquear las obras se prolongará hasta el último instante.
Diferencias astronómicas en la documentación levantan sospechas
La reanudación de las obras permitiría modificar el proyecto de 2022. La nueva versión del Nou Mestalla, sensiblemente adelgazada, sería un estadio de bajo coste, en el que el importe por asiento no superaría los 5.000 euros a costa del aspecto, la comodidad de los aficionados y dejando partes del estadio prácticamente en el estado actual. El proyecto esperaba contar con el favor de la nueva administración municipal.
Sin embargo, las cifras que figuran en la documentación no concuerdan. Como señaló el antiguo vicepresidente del club, Miguel Zorío, la actual presidenta, Lay Hoon Chan, dijo en diciembre que se necesitaban unos 160-170 millones de euros para terminar el estadio, mientras que ya se habían invertido en la instalación unos 170-180 millones de euros. Sin embrago, los documentos presentados por el arquitecto Mark Fenwick muestran que sólo se han invertido 77,8 millones de euros en el estadio hasta la fecha.
¿Como evaporaron los 100 millones de euros? No se sabe. Miguel Zorío señaló que estas cifras indican un posible delito fiscal por parte de la administración del club y exigió que una auditoría investigue no sólo la cantidad de dinero necesaria para terminar las instalaciones, sino también cuánto y en qué se gastó exactamente ese dinero.
¿Venderá Lim el Valencia?
Nueve años de progreso cero. Así se puede resumir la etapa de Peter Lim como propietario del club. Los aficionados están cansados y ya no se creen las promesas de Lim ni de su administración. Muchos quieren quedarse en el viejo
Mestalla y exigen su mejora. A otros les gustaría una mudanza, pero no creen que vaya a producirse con un empresario singapurense al timón.
Las esperanzas se reavivaron con las noticias de ofertas de compra del club, pero estas fueron rechazadas. Una de ellas fue realizada indirectamente por el propio Miguel Zorío. Libertad VCF, una asociación de socios y aficionados, decidió aumentar la presión sobre Peter Lim para que venda el club. El 2 de marzo (sábado), antes del partido contra el Real Madrid, se celebrará una manifestación contra Lim a las puertas del estadio.
La esperanza no la puede quitar nadie, pero el empresario singapurense ha demostrado a lo largo de los años que es inmune a las críticas, especialmente de los aficionados. Hará falta no sólo la presión de políticos y aficionados, sino, sobre todo, una buena cantidad de dinero para sacarle del puente de mando. Mientras tanto, el tiempo corre y las posibilidades de que el Nou Mestalla se convierta en uno de los 10 estadios españoles para el Mundial de 2030 se reducen cada día.
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