Italia: Lazio sigue sin estadio propio. Dos propuestas bloqueadas

fuente: EstadiosDB.com; autor: Jakub Ducki

Italia: Lazio sigue sin estadio propio. Dos propuestas bloqueadas El Stadio Flaminio lleva años sumido en el abandono. A pesar de numerosos intentos de revitalización, ninguno se ha materializado. Hoy, la propuesta que más debate genera es la presentada por el propietario de la Lazio. Pero ante la creciente oposición y los obstáculos burocráticos, ¿está el Flaminio condenado a una nueva etapa de estancamiento?

Publicidad

Oposición al proyecto de Lotito

Giulio Castelli, portavoz del Comité Stadio Flaminio, se ha manifestado enérgicamente en contra del plan de ampliación del estadio propuesto por Lotito. En declaraciones a Radio Roma Sound, poco después de los preocupantes enfrentamientos previos al Derby della Capitale, Castelli subrayó que la capacidad del Flaminio no debería superar los 23-24.000 espectadores, un límite de lo que los residentes consideran aceptable desde el punto de vista logístico y de seguridad.

Castelli señaló que el estadio se encuentra en una zona céntrica y densamente urbanizada de Roma, con gradas a escasos metros de edificios residenciales. Esta situación, unida a una infraestructura vial limitada y a la cercanía de nudos clave de transporte, según él convierte el proyecto en una locura urbanística. Los recientes disturbios en Piazzale di Ponte Milvio, producidos ese a los amplios espacios que rodean el Stadio Olimpico, ilustran lo complicado que podría ser el escenario si se traslada a miles de aficionados al entorno del Flaminio.

Sin estudio de viabilidad, solo ruido mediático

Otro punto crítico es el estatus formal del proyecto. Según el Departamento de Deporte del Ayuntamiento de Roma (Campidoglio), la documentación presentada por Lotito no cumple los requisitos legales para ser considerada un estudio de viabilidad. Solo se ha entregado un esquema económico preliminar, sin planes técnicos detallados, evaluaciones ambientales ni análisis de movilidad.

En la práctica, y a pesar de la cobertura mediática, el proceso para convertir el Flaminio en el nuevo estadio de la Lazio ni siquiera ha comenzado. Mientras tanto, el tiempo corre: Lotito ha declarado que desea inaugurar el estadio en junio de 2029. Dada la complejidad del proyecto, cualquier retraso disminuye las probabilidades de cumplir con esta fecha.

Stadio Flaminio© Pietromassimo Pasqui

Roma Nuoto, rechazada pese a su adecuación local

En paralelo a la propuesta de Lotito, también se evaluó el plan presentado por Roma Nuoto, una organización deportiva con fuertes vínculos locales. Este proyecto proponía reducir la capacidad del estadio a 7.500 asientos, eliminar barreras y grandes áreas comerciales, y garantizar una plena integración con el vecindario. La idea tenía un enfoque comunitario y multifuncional, incluyendo deportes minoritarios como el fútbol femenino y el rugby.

Sin embargo, el Ayuntamiento rechazó casi por unanimidad esta propuesta. La razón oficial: una distorsión del carácter del estadio, que según su diseño original debía acoger eventos de nivel nacional e internacional. Para las autoridades municipales, el Flaminio debe seguir siendo un gran estadio de fútbol, no un recinto local de uso limitado.

Visualización de la demolición del Stadio FlaminioVisualización de la demolición del Stadio Flaminio

Intereses enfrentados y lucha política

El caso del Flaminio ha encendido no solo la polémica entre vecinos e inversores, sino también una pugna política en el seno del Ayuntamiento. Mientras que la mayoría de los concejales sostiene que la propuesta de Roma Nuoto no cumple con los estándares, la oposición, liderada por Fratelli d’Italia y la Liga, teme que Roma acabe sin nada: ni el proyecto de Roma Nuoto, ni una propuesta concreta por parte de la Lazio.

Federico Rocca, de FdI, advierte que si el plan de Roma Nuoto encontró trabas con la Superintendencia, el de Lotito, si es que llega a presentarse formalmente, enfrentará aún más dificultades. Incluso entre los concejales que no votaron en contra del plan local, hay quienes alertan sobre un nuevo invierno de decadencia para el Flaminio si la situación no cambia.

Publicidad