El 13 de septiembre, se llevó a cabo una reunión en el Palazzo Marino entre el alcalde de Milán, Giuseppe Sala, y la alta dirección del Inter y AC Milán. Los clubes rechazaron la propuesta de renovación de San Siro por parte de WeBuild, que habría costado unos 400 millones de €.

Dijeron "no"

Después de un largo análisis, los equipos concluyeron que San Siro no puede ser renovado, al menos no a costos asequibles, y por lo tanto, no consideran esta opción viable, en contra de lo que se había pensado en los últimos meses. Su propuesta es volver a la idea de un nuevo estadio en la zona de San Siro, dijo Sala después de la reunión. Este es un giro inesperado, ya que la hipótesis de una nueva instalación cerca de Meazza, planteada por primera vez en 2019, había sido descartada, hasta el punto de que ambos clubes habían comenzado a tomar medidas concretas hacia la construcción de dos estadios independientes en San Donato y Rozzano. Los clubes llegaron a esta conclusión después de un extenso análisis de viabilidad técnica y económica, explicó el alcalde.

La propuesta de las autoridades de Milán consistía en la renovación del Meazza. El proyecto y el estudio de viabilidad fueron encargados a WeBuild, que presentó a Milán e Inter un plan de renovación del estadio sin causar dificultades a los equipos y sus calendarios. La renovación y las adaptaciones irían de la mano. Si ambos clubes hubieran aceptado la propuesta, el estadio habría sido vendido a ambas partes.

© Grzegorz Kaliciak

Regresando a un proyecto descartado

Desde 2019, se ha avanzado algo y ahora es posible comenzar de nuevo, precisamente con una resolución del consejo de la ciudad que diga sí a un nuevo estadio al oeste de San Siro, hacia via Tesio y Parco dei Capitani. Lo más probable es que se utilice el proyecto de la empresa Populous, aunque con algunas modificaciones derivadas del debate público. Inter y Milán buscan construir un estadio para 70,000 personas manteniendo los precios actuales de las entradas. Además, el área alrededor del estadio verá un aumento de áreas verdes, pasando del 18 % en San Siro al 50 %. El proyecto también tendrá que actualizar la distancia permitida de las casas en via Tesio, medidas para mitigar el impacto acústico y asignar 40 millones de € para la renovación urbana de edificios públicos alrededor de Piazzale Selinunte.

© Populous / Nuovo Stadio Milano

Tensiones en el ayuntamiento

En cuanto al futuro de San Siro, ciertamente será parcialmente desmantelado, pero aún será adecuado para el deporte y otras funciones públicas, como albergar un museo. Milán se prepara para meses calientes. Los concejales que siempre se han opuesto a la construcción de un nuevo estadio ya están preparados para luchar. Los equipos cambian de opinión cada diez días y juegan con el municipio porque se encuentran con interlocutores débiles y sumisos, dijo el concejal Carlo Monguzzi. El municipio dio una dirección clara: renovar Meazza. ¡Otro estadio junto a San Siro sería una locura, destruyendo 50,000 m² de espacio verde! concluyó.

La primera reunión sobre este asunto se llevará a cabo el 27 de septiembre a las 16:30. Incluso dentro del Partido Demócrata, están surgiendo voces de oposición a la idea de un nuevo estadio. Alessandro Giungi, por ejemplo, dijo: Durante años hemos sido testigos de un sinfín de hipótesis, solicitudes y propuestas. Por supuesto, me opongo a la construcción de un estadio cerca de San Siro, por razones ambientales y por simple sentido común. Creo que es hora de que el consejo municipal se involucre y sea informado oficialmente sobre este juego interminable. Por otro lado, los concejales de centroderecha, en su mayoría a favor del nuevo estadio, acusan a Sala de perder tiempo al regresar a la idea original. Según el líder del grupo Fratelli d’Italia, Riccardo Truppo, el proyecto de los dos estadios es uno de los mejores proyectos que se pueden llevar a cabo y que debe continuar.