El presidente de La Liga, Javier Tebas, ha confirmado que el Villarreal-Barcelona, previsto para el fin de semana del 20 y 21 de diciembre, se disputará en Miami.

A la espera del visto bueno final

Ya está prácticamente terminado y poder decir que el sábado 20 de diciembre se jugará en Miami un partido oficial de Liga, el Villarreal vs. Barcelona, un partido en el que habrá puntos en juego, que, en vez de jugarse en el Estadio de la Cerámica, en Villarreal, se jugará en Miami, notificó el presidente de La Liga en su rueda de prensa.

La decisión llega pocos días después de que la UEFA diera luz verde a la disputa del encuentro en Estados Unidos. La cúpula de la Liga debe presentar ahora una solicitud formal a la Federación de Fútbol de EE. UU. (USSF), que, según fuentes de ESPN, ya ha dejado claro que no pondrá obstáculos. Solo falta la ratificación de la Concacaf, el organismo que agrupa a los países de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe. La FIFA, por su parte, no intervendrá en el proceso.

Según el calendario original, el Villarreal debía recibir al Barça en su estadio, pero el partido se trasladará finalmente al Hard Rock Stadium de Miami. A comienzos de semana, la UEFA reiteró su oposición a que los campeonatos nacionales se jueguen fuera de sus fronteras, aunque aceptó de forma excepcional dos casos: el Villarreal- Barcelona en EE. UU. y el Milan-Como, que se jugará en febrero en Perth (Australia).

© Villarreal CF | Estadio de la Cerámica (Feudo Amarillo)

El primer partido de una gran liga fuera de Europa

Si todas las partes dan el visto bueno, el encuentro se convertirá en el primero de una de las cinco grandes ligas europeas que en jugarse fuera del continente. La Liga sigue así el camino de la NFL y la NBA, que desde hace años organizan partidos internacionales.

Desde 2017, la competición española intenta llevar un partido oficial a Estados Unidos, pero hasta ahora se había topado siempre con la negativa de la RFEF. Finalmente, en enero de este año, la federación aprobó el proyecto. La Asociación de Futbolistas Españoles también ha anunciado una reunión con LaLiga, el Barça y el Villarreal.

La celebración de un partido oficial fuera de España implica cambios tanto deportivos como laborales. Por eso consideramos que este tipo de iniciativas deben contar con consenso total y diálogo entre todas las partes, especialmente con los propios jugadores, señaló la AFE en un comunicado.

En la web del Hard Rock Stadium ya se ha abierto el registro previo para la compra de entradas del Villarreal – Barcelona. La preventa comenzará el 21 de octubre y la venta general un día después.

© Grzegorz Kaliciak | Hard Rock Stadium (Dolphins Stadium)

Frenkie de Jong en contra, Laporta a favor

Aunque la decisión de disputar el partido Villarreal–Barcelona en Miami ya ha sido aprobada de forma provisional por las principales instituciones, no estuvo exenta de polémica. En los últimos días, Frenkie de Jong criticó abiertamente la idea de trasladar los partidos de La Liga fuera de España.

"No es justo para la competición. Ahora jugamos un partido fuera de casa en terreno neutral. No me gusta y no creo que esté bien por los jugadores", declaró el centrocampista del Barcelona. Añadió que, en la práctica, el Villareal pierde la ventaja de jugar en casa y que los jugadores nunca son consultados sobre este tipo de decisiones.

También han surgido voces críticas dentro del fútbol español. Según un artículo citado por Inside World Football, muchos jugadores y dirigentes consideran que la idea de llevar los partidos de La Liga al extranjero forma parte de una estrategia llamada sportswashing, otro paso hacia la comercialización del campeonato a costa de los aficionados locales.

Mientras tanto, el presidente de La Liga, Javier Tebas, defendió la medida calificándola como un momento histórico para el fútbol español. Afirmó que disputar partidos en Estados Unidos ayudará a promover la competición y abrirá nuevas fuentes de ingresos. El presidente del Barcelona, Joan Laporta, también se mostró entusiasmado, señalando que es una gran oportunidad para acercarse a miles de aficionados en América que normalmente no tienen la oportunidad de ver al equipo en directo.