La temporada 2024/25 en Florencia estuvo marcada no solo por la competición deportiva, sino también por un acuerdo alcanzado con el Ayuntamiento para la remodelación del Stadio Artemio Franchi. En el contexto de la burocracia italiana, la firma de dicho acuerdo abre la puerta a escenarios que en otros países serían mera formalidad.

El verano permite avanzar sin interrupciones

El acuerdo alcanzado entre la Fiorentina y la ciudad contempla el uso del estadio para partidos de la Serie A y la Coppa Italia hasta el 31 de mayo o el 30 de junio de 2026, pese a las obras en curso. Pero hay una condición: menos público y, en consecuencia, menores ingresos. A cambio, la Fiorentina logró negociar una reducción del alquiler anual, aunque esta condición aún no ha sido formalmente aprobada.

Tras el último partido de la temporada ante el Bologna, comenzó una larga pausa veraniega, durante la cual el estadio fue entregado por completo a las empresas encargadas de las obras. Aunque los trabajos ya habían comenzado antes, es ahora, ya que no hay partidos, cuando es posible avanzar sin interrupciones. Los casi 100 días de acceso ininterrumpido al recinto dieron a los obreros un margen de tiempo crucial, especialmente porque el club solicitó jugar las tres primeras jornadas del curso 2025/26 como visitante. Sin embargo, la solicitud sólo fue aceptada parcialmente: la Fiorentina jugará fuera ante el Cagliari (24 de agosto) y el Torino (31 de agosto), pero recibirá al Napoli en el Franchi tras la pausa internacional (14 de septiembre).

© ACF Fiorentina

Avances y cronograma de la obra

Desde el Palazzo Vecchio aseguran que gracias a un sistema rotativo de turnos de trabajo será posible mantener la continuidad del proyecto. La primera fase incluye la grada Fiesole y la parte izquierda de la tribuna Maratona. Luego está prevista la renovación de la torre Maratona y la modernización de infraestructuras clave – como la reubicación de los baños, que pasarán del subsuelo a la planta baja.

La intensificación de los trabajos llega en un momento clave – no solo por el centenario del club en 2026, sino también por el plazo fijado para finalizar las obras financiadas por el PNC-PNRR (Plan Nacional de Recuperación). Las empresas Cobas y Sac están a cargo del proyecto, que debe concluir a finales de 2026.

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Fiorentina y el Ayuntamiento – la cuestión financiera

Sigue sin resolverse cómo podría el club colaborar con el Ayuntamiento para cubrir el coste de la inversión. El presupuesto ronda los 100 millones de euros. Aún falta parte del financiamiento necesario para ejecutar por completo el proyecto desarrollado por Arup. Aquí podría ser clave el papel del presidente Rocco Commisso. Pese a su capacidad económica, Commisso ha reiterado que preferiría destinar sus recursos de otra forma. Al término de la temporada, insistió en la necesidad de cooperar para acelerar el proceso: Por el bien de la Fiorentina, debemos colaborar y hacer todo lo posible para terminar la renovación cuanto antes. Un estadio que funciona solo parcialmente no tiene sentido.

También recordó que el Franchi pertenece al municipio, que, como muchas administraciones locales italianas, no está dispuesto a venderlo. Esto genera un conflicto de fondo: Pudimos haber tenido un estadio moderno y funcional sin necesidad de demoler todo. Lamento que no se me permitiera realizarlo. Marotta tiene razón: en Italia solo se han construido dos estadios nuevos, lo cual nos deja rezagados frente al resto de Europa.