Los jugadores del Rayo Vallecano se ganaron en la última jornada el derecho a jugar en Europa, un motivo de celebración para la afición y un problema serio para las autoridades del club. El estado de su estadio ya ha amenazado con cierre este año, dejando en entredicho los partidos de la Conference en Vallecas.

Un problema logrado en la última jornada

Un milagro. Así puede calificarse la gesta del Rayo Vallecano en la temporada 24/25, ya concluida, en la que el club celebró su centenario. A pesar de que su plantilla era la 18ª en cuanto al valor de sus jugadores, el equipo consiguió, por primera vez en su historia, alcanzar una posición que le permite disputar competiciones europeas: el 8º puesto en la tabla obtenido gracias a un empate ante el Mallorca (0:0) en la última jornada le vale el billete para los play-offs de la Conference League.

Pero dos minutos después del pitido final, cuando la noticia del favorable resultado del Osasuna-Alavés, al Rayo llegó a Vallecas, junto con la euforia en la grada y en el campo surgió un problema: el Estadio de Vallecas podría no pasar la inspección de la UEFA. Ni siquiera se trata de cumplir los requisitos de la categoría 4, que permite jugar en el estadio todos los partidos hasta semifinales, sino del estado técnico del recinto.

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— El Partidazo de COPE (@partidazocope) July 3, 2024

La federación europea tiene derecho a inspeccionar los estadios, y lo que encontrará en el Estadio de Vallecas no será, desde luego, muy agradable. El estadio lleva muchos años en un estado de deterioro: sucio, lleno de basura, con grietas en las paredes y lleno de humedad. La actual renovación, o más bien limpieza y subsanación, debería mejorar la situación, pero el presidente del club, Raúl Martín Presa, ha declarado que aunque espera que la UEFA permita al estadio jugar en el torneo, el milagro que es jugar cada partido en el estadio.

En busca del culpable

Presa acusó a la Comunidad de Madrid, propietaria del estadio, de la situación actual, afirmando que económicamente son el equipo menos apoyado del fútbol profesional en España. El presidente lleva años defendiendo la necesidad de cambiar el estadio, esperando el apoyo de las autoridades. Sin embargo, el Gobierno, tras apoyar inicialmente los planes de Presa, decidió, en línea con los deseos de la gran mayoría de los seguidores del Rayo, invertir en la modernización del estadio.

La mayoría de los aficionados, sin embargo, acusan a Raúl Martín Presa, que no goza de buena reputación en Vallecas, del mal estado del campo. Le acusan de no recoger deliberadamente la basura y de no limpiar los aseos o incluso los excrementos de pájaros. El Rayo es también el único club profesional de España que no permite comprar entradas por Internet, algo que los aficionados llevan años reclamando. Pero lo que ha despertado especial resistencia de los Rayistas son los planes para construir un nuevo estadio. Muchos temen que, en contra de lo anunciado por el presidente, no se construiría en Vallecas, ya que allí no hay espacio para un nuevo recinto.

© Groundhopping.se| El Rayo Vallecano es una rareza en el fútbol español, ya que el club no se identifica con la ciudad, sino solo con uno de sus barrios: Vallecas.

¿Europa o un estadio en Vallecas?

Y es que para la mayoría de los aficionados, el Rayo Vallecano sin Vallecas no es el Rayo. Incluso antes del decisivo partido contra el Mallorca, Marca realizó una encuesta entre los aficionados, con la pregunta ¿Europa o seguir en el estadio?. Aunque algunos se apuntaron a las competiciones continentales, muchos eligieron el estadio. El Rayo no es el Rayo sin este estadio, dijo sin dudar un aficionado. El estadio es la identidad de este barrio. El estadio por encima de todo, eligió el segundo.

Ya es seguro que el Rayo jugará al menos las eliminatorias de Conference. Lo que es una incógnita es si lo hará en Vallecas.