El ayuntamiento de Liverpool está implementando una zona de aparcamiento en días de partido alrededor del nuevo estadio del Everton en Bramley-Moore Dock. Más de 4.000 residentes y 3.000 empresas han sido invitados a solicitar los permisos de aparcamiento necesarios antes del lanzamiento oficial de la zona.

Un experimento en beneficio de residentes y aficionados

Las nuevas normas serán aplicadas bajo una ley experimental de regulación del tráfico (ETRO), que entrará en vigor este mes, con el primer partido de prueba en el Everton Stadium, la nueva casa de los Toffees, que costó unos 500M£. El experimento durará un máximo de 18 meses, período tras el que el ayuntamiento revisará su impacto.

Los residentes podrán solicitar un permiso de estacionamiento por cada vehículo matriculado en su domicilio, junto con un permiso adicional para visitantes, todo ello de forma gratuita. Las empresas, por su parte, deberán pagar una tasa anual de 50£ por vehículo, con un límite de hasta 10 vehículos. La zona de aparcamiento abarcará un área en un radio de 30 minutos a pie del nuevo estadio del Everton, situado cerca de la histórica Dock Road. También incluirá el distrito de Ten Streets, parte del centro de la ciudad, y la zona de Great Homer Street, en Everton.

Las nuevas normas de aparcamiento, que fueron objeto de una consulta pública a finales de 2022, incluyen la creación de nuevas zonas de aparcamiento para residentes, nuevas paradas de taxis, nuevas paradas de autobuses para días de partido y restricciones adicionales de estacionamiento. Los cambios afectarán los horarios de funcionamiento de las zonas de aparcamiento ya existentes en la zona Además, habrá dos nuevas zonas de aparcamiento para áreas industriales.

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La ciudad sigue buscando nuevas soluciones

El objetivo principal de la nueva zona de aparcamiento es reducir atascos, mejorar la calidad del aire y aumentar la seguridad en los alrededores del estadio. Estas medidas también forman parte de un plan más amplio para modernizar el sistema de aparcamiento en el centro de Liverpool. El equipo de transporte e infraestructuras viales del ayuntamiento ya ha comenzado a instalar nuevas señales de tráfico en preparación para el primer partido de prueba en el Everton Stadium el lunes 17 de febrero.

El ayuntamiento de Liverpool ha invertido más de 20M£ en infraestructuras viales en la zona de Bramley-Moore Dock, incluida la construcción de un carril bici que conecta el centro de la ciudad con su límite norte en Bootle, en el condado de Sefton, pasando justo al lado del nuevo estadio. Además, las autoridades locales de Liverpool están colaborando con el ayuntamiento de Sefton y la Liverpool City Region Combined Authority en un nuevo proyecto urbanístico que prevé la construcción de más de 10.000 nuevas viviendas e infraestructuras sociales desde el centro de la ciudad, pasando por las áreas alrededor del nuevo estadio, hasta Bootle y Walton.

La Liverpool City Region Combined Authority también está trabajando junto con Merseyrail, Network Rail y el Everton para desarrollar una nueva zona de gestión del tráfico peatonal y una entrada adicional a la estación de Sandhills. El objetivo principal de estas iniciativas es facilitar el acceso al transporte público para los aficionados y asistentes a eventos en el nuevo estadio.

El concejal Dan Barrington, miembro del gabinete del ayuntamiento de Liverpool para transporte y conectividad, destacó que el estadio del Everton tendrá un gran impacto en el distrito de Ten Streets y en la comunidad de Kirkdale. Señaló que, además de los beneficios económicos, será fundamental gestionar adecuadamente el flujo de personas que acudirán a los partidos y eventos. La zona de North Docks nunca antes había tenido que gestionar una afluencia tan grande de visitantes en periodos de tiempo tan cortos. Sin embargo, gracias a la experiencia adquirida con la gestión del tráfico en los alrededores de Goodison Park y Anfield, la ciudad cuenta con el conocimiento necesario para manejar la situación de manera eficiente.

La introducción de la nueva zona de aparcamiento permitirá aplicar estrategias de gestión del tráfico ya probadas, que han facilitado durante años el movimiento fluido de decenas de miles de personas en eventos deportivos. El concejal Barrington añadió que la nueva zona de aparcamiento afectará no solo a residentes y empresarios, sino también a los aficionados del Everton. Gracias a sus comentarios y sugerencias, se han desarrollado soluciones que tienen en cuenta las necesidades de todas las partes interesadas.

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Un gran éxito para una iniciativa única

Todas las piedras que formarán un camino conmemorativo en honor a los aficionados del Everton, tanto pasados como presentes, en el nuevo estadio se han agotado por completo. Esto significa que un impresionante total de 36.000 ladrillos personalizados llenarán la plaza sur del imponente recinto, formando el Everton Way. Las últimas piedras fueron adquiridas poco después de que comenzaran los trabajos en este elemento especial del estadio, y las primeras dedicatorias ya aparecieron el mes pasado.

Las piedras llevan inscripciones llenas de amor y amistad, conmemorando nacimientos, bodas, la pasión por el club y a seres queridos que, de esta forma simbólica, se convertirán en parte de la nueva etapa del Everton a orillas del río Mersey. Everton Way ha sido un éxito rotundo desde el principio. La primera tanda de ladrillos se agotó rápidamente, y la gran cantidad de solicitudes de quienes no lograron comprarlos llevó a la apertura de nuevas ventanas de venta y a la ampliación del camino. Las personas que adquirieron una piedra sabrán exactamente dónde se encuentra una vez que el proyecto finalice este verano.

Kevin O'Brien, director de Intaglio Creative Limited, la empresa responsable del proyecto, destacó la magnitud de la iniciativa. Cuando te paras al inicio de Everton Way y miras hacia el río, te das cuenta de que este es un proyecto de un calibre completamente diferente. En los últimos diez años, he participado en muchas iniciativas similares en todo el país, pero aquí estamos hablando de 1.400 metros cuadrados y 36.000 piedras individuales, lo que lo convierte, sin duda, en el mayor proyecto de personalización en el Reino Unido.

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