La Junta Directiva del FC Barcelona, que se ha reunido el lunes por la tarde, ha hecho una evaluación de la situación económica del club, que sigue sufriendo por jugar en Montjuïc. Aunque el club evita fijar fechas exactas, ha dado una pista importante al decir que espera volver al Camp Nou para “el segundo semestre de la temporada”.

Los números de Montjuïc

La Junta Directiva del club blaugrana celebró el lunes una sesión extraordinaria para preparar el cierre económico de la temporada 23/24 y el presupuesto para la temporada vigente. Ambos documentos tendrán que ser evaluados y aprobados (o no) por la Asamblea General Ordinaria.

Lo que ya destaca en los datos proporcionados por el club es que el club cerró el curso pasado con pérdidas de 91 millones de euros. La cúpula del club indica, tal y como lo ha hecho en reiteradas ocasiones Laporta, que esto se debe a la estancia en el Estadi Olímpic Lluís Companys, que conlleva una reducción de ingresos ordinarios de más de 100 M€ al año.

A pesar de los números en rojo, el comunicado insiste en la eficiencia de la gestión de la estancia en Montjuïc y destaca la rebaja de la masa salarial en 170M€, ventas de jugadores por más de 80M€ y los beneficios récord de los acuerdos de patrocinio, valorados en 210M€.

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Vuelta a casa

Lo más importante del comunicado es, sin embargo, la pista que da el club sobre la vuelta al Spotify Camp Nou. El primer equipo masculino de fútbol seguirá jugando en el Estadi Olímpic durante el primer semestre de la temporada, con el objetivo de volver a un Spotify Camp Nou con aforo reducido en la segunda vuelta, reza el comunicado.

El club evita fijar fechas exactas y sigue sin usar ni siquiera la palabra volverá, aumentando la incertidumbre y dándole más importancia a los rumores de importantes contratiempos que, de ser verdaderos, significarían que la vuelta al Camp Nou se podría retrasar incluso hasta abril.

Aun así, el comunicado da pistas suficientes para suponer que el objetivo es volver al Camp Nou para el partido contra el Valencia el 26 de enero, ya que ese será el primer partido de casa tras cumplirse los seis meses desde el comienzo del curso para el Barcelona, precisamente contra el Valencia en Mestalla, que acabó en un 1:3 para el conjunto blaugrana.

Varios medios indican que otra opción posible es regresar cuando se acabe la liguilla de Champions, que solo puede jugarse en Montjuïc, para no marear a la afición. De ser así, el Barca volvería al Camp Nou el 2 de febrero para medirse con el Alavés, tras el último partido en casa de la primera fase de la Liga de Campeones, el 29 de enero contra el Atalanta.

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