El viernes 30 de agosto se celebró una reunión clave para debatir la remodelación de La Rosaleda. Con vistas a la Copa del Mundo de 2030, el estadio se someterá a una importante transformación para cumplir los requisitos de la FIFA y ofrecer un entorno aún mejor a los aficionados.

Reunión de autoridades y decisiones clave

A la reunión asistieron: Patricia del Pozo, consejera de Cultura y Deporte, Francisco Salado, presidente de la Diputación de Málaga, y Francisco de la Torre, alcalde de Málaga. Las tres administraciones, propietarias del estadio a partes iguales, acordaron seguir trabajando en el proyecto de transformación de La Rosaleda.

Uno de los puntos más importantes tratados en la reunión fue la necesidad de aumentar el número de localidades del estadio. La capacidad actual del estadio, de unos 30.000 asientos, se ampliará a 45.000. Si La Rosaleda se tiene que hacer de 50.000 o 75.000 localidades, mejor que mejor, declaró de la Torre. Se trata de una decisión importante, sobre todo en el contexto del gran interés que despierta el fútbol en la región, como pone de manifiesto la llamada Malagamanía, una oleada de entusiasmo entre los aficionados locales que ha hecho que se agoten las entradas para los partidos.

© Junta de Andalucía

Modernización integral de La Rosaleda

La transformación del estadio no se limita a aumentar su capacidad. Las autoridades malagueñas tienen previsto transformar todo el complejo del estadio, integrándolo en un plan urbanístico más amplio. Entre las propuestas está la construcción de un hotel de lujo y la ampliación de la infraestructura de servicios para hacer de La Rosaleda una de las instalaciones más modernas en España.

La mejora de los accesos al estadio, las comunicaciones y la dotación de un número adecuado de plazas de aparcamiento son también aspectos clave. Hasta 5.000 plazas de aparcamiento están previstas para facilitar la organización del tráfico y dar cabida a más visitantes. Todo ello con el fin de cumplir los estrictos requisitos de la FIFA.

La transformación del estadio de La Rosaleda no sólo pretende mejorar las condiciones para los aficionados, sino también crear un centro deportivo y comercial moderno que atraiga a inversores y turistas de todo el mundo. Las autoridades malagueñas han convocado un concurso de 300.000 euros para estudiar las posibilidades comerciales del estadio. El objetivo es atraer capital privado que ayude a financiar la ampliación del estadio y sus alrededores.

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Calendario de obras

Las autoridades malagueñas tienen un calendario claro para las obras, cuyo objetivo es completar la transformación de La Rosaleda en 2028, dos años antes del Mundial. Se trata de un plazo clave para que todas las obras se realicen a tiempo y el estadio pueda cumplir plenamente los requisitos de la organización del Mundial. Todo ello en un contexto de costes crecientes, estimados actualmente en más de 260 millones de euros.