El club de Segunda División presentó a mediados de mayo un proyecto para dar una nueva vida a su estadio, La Romareda. El concepto ha sido desarrollado por el estudio español IDOM y consiste en ampliar significativamente el auditorio y permitir al Zaragoza presentar su candidatura para albergar la Copa del Mundo de 2030.

La Romareda se modernizará

La Romareda de Zaragoza se inauguró en 1957. A lo largo de los años, el recinto ha sufrido varias remodelaciones, pero conserva gran parte de su forma original. Se planeó una remodelación a gran escala del estadio para la Eurocopa 2004, pero finalmente Portugal ganó el derecho a albergar el torneo. Posteriormente se intentó modernizar por completo, pero no se llevó a cabo. Además, se barajó la posibilidad de construir un estadio completamente nuevo en un emplazamiento diferente, pero estos planes tampoco prosperaron.

Sin embargo, el 12 de mayo se produjo un gran avance. Las autoridades, en colaboración con el prestigioso estudio de arquitectura IDOM, mostraron imágenes del estadio que se construiría en el emplazamiento de su predecesor, y el proyecto adoptó su nombre provisional: Nueva Romareda. La fecha no es casual, ya que ese día finalizaba el plazo establecido por la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) para la presentación de la documentación requerida para las sedes que aspiran a formar parte de la candidatura del país para albergar el Mundial de 2030.

© IDOM

Además, el Ayuntamiento de Zaragoza, propietario de La Romareda, tiene en marcha un concurso público para el arrendamiento a largo plazo del estadio, que finaliza en septiembre. El club, que desea sumarse a la batalla por su sede, ha tenido que presentar un proyecto de remodelación del estadio.

¿Cómo será Nueva Romareda?

Según el concepto elaborado por IDOM, las gradas del estadio tendrán capacidad para 42.000 espectadores. El estadio tendrá un diseño típicamente futbolístico y el auditorio estará dividido en dos niveles con gradas estrechas adicionales a lo largo del campo. Detrás de las gradas habrá zonas de servicios y el conjunto tendrá una forma unificada y coherente.

Los arquitectos se inspiraron en los vientos frescos del norte que soplan en la zona, conocidos como cierzo, y dieron dinamismo a la forma rectangular del estadio mediante el uso de sutiles convexidades y cóncavas. La estructura estará rematada por una cubierta ligera, que cubrirá no sólo todos los asientos del auditorio, sino también la terraza mirador que rodea las gradas. Los colores dominantes del estadio serán el azul y el blanco.

El estadio estará equipado para albergar competiciones de fútbol de alto nivel. Además, se celebrarán otros acontecimientos, no sólo deportivos. Hay que señalar que los planos presentados por el club e IDIOM son por el momento preliminares y están sujetos a cambios en el diseño final.

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Se espera que la realización del proyecto cueste unos 140 millones de euros. La construcción se financiará exclusivamente con fondos privados. Está previsto que las obras se lleven a cabo entre 2024 y 2028, y se realizarán por fases para que los blanquillos puedan disputar sus partidos en el estadio en todo momento.