El área elegida para el proyecto de los Friedkin, propietarios de la AS Roma, incluye más de 3 hectáreas de superficie forestal, cinco veces más de lo que se estimaba en verano. Este es el principal dato que emerge del análisis realizado sobre más de 23 de las 27 hectáreas destinadas a la construcción del nuevo estadio romanista. Pero, sorprendentemente, el proyecto es viable.

Terreno de escaso valor natural

El estudio revela que la zona comprende terrenos agrícolas, áreas urbanizadas con edificios y jardines privados, así como espacios cubiertos por vegetación que no cumple los criterios legales para ser considerados bosques. Aun así, se ha identificado un pequeño conjunto de parcelas no contiguas, con una extensión total de 3 hectáreas y media, reconocidas como forestales. Las investigaciones previas, en agosto, hablaban de apenas 0,7 hectáreas calificadas de bajo valor ecológico.

Según el informe, la vegetación existente es de escasa calidad ambiental: se trata de un bosque secundario surgido en antiguos campos agrícolas o huertos, colonizados por especies pioneras, comunes e invasoras, con presencia limitada de flora autóctona. Por ello, se prevé su transformación mediante plantaciones compensatorias de especies de mayor valor ecológico.

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Un nuevo estadio como motor de regeneración urbana

El análisis, firmado por Mario Uniformi, confirma los resultados de los estudios agronómicos realizados durante las excavaciones arqueológicas: la flora en La zona tiene bajo valor natural y puede ser sustituida por especies más valiosas.

El informe subraya que gran parte de los terrenos destinados al nuevo estadio de la Roma se encuentran hoy en estado de abandono y degradación. Las parcelas calificadas como forestales presentan escaso interés vegetal y ecológico. Las autoridades municipales insisten en que el proyecto permitirá la regeneración completa de Pietralata, con la creación de un gran parque verde de 11 hectáreas, de las cuales 3 se reservarán para la restauración natural del ecosistema. A la espera del proyecto definitivo de los Friedkin, previsto para finales de 2025, el informe agronómico representa un paso clave hacia la construcción del nuevo estadio de la AS Roma.

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